De muy buena fuente, Líbero ha conocido que Burga viene a Lima decidido a rehacer su actividad como dirigente y postular a la presidencia de la Federación Peruana de Fútbol a finales del 2018. Para ello, cuenta con el apoyo de los presidentes de la federaciones departamentales quienes aun le deben agradecimiento a Manuelito, por las dádivas que de él recibían.
Lamentablemente, la FPF nunca deslindó de su ex presidente y jamás lo acusó de nada. Por ello, el camino de regreso al sillón que antes ocupaba tiene vía libre. Solo la acción decidida de la actual directiva podría impedir “volver al pasado” con Burga.