Un médico del condado de Harris, ubicado en Texas, Estados Unidos, fue acusado de haber robado vacunas contra la COVID-19, del centro del centro de salud en el que labora, para dárselas a sus familiares y seres queridos.
Según indica la Oficina Fiscal del Distrito del Condado de Harris, el pasado 29 de diciembre del 2020 el doctor Hasan Gokal sustrajo un vial con nueve dosis en su poder mientras trabajaba en el centro de vacunación de la zona, ubicado en Lyndsay Lyons Park.
“Abusó de su posición para poner a sus amigos y familiares en la fila frente a personas que habían pasado por el proceso legal para estar allí. Lo que hizo fue ilegal y será responsable bajo la ley”, explicó Kim Ogg, fiscal de Harris.
Asimismo, el hecho salió a la luz debido a que Gokal se lo comentó a uno de sus colegas, quien no guardó el secreto y se lo informó inmediatamente al gerente. Fue así que, tras una investigación interna, el médico fue despedido y su caso denunciado a las autoridades.
Sin embargo, el abogado del trabajador de salud indicó que esas vacunas “iban a echarse a perder” y que Gokal solo quiso asegurar que estas lleguen a “brazos de personas que cumplían con los criterios para recibirlas!”.
“El Condado de Harris habría preferido que el Dr. Gokal dejará que las vacunas se desperdicien y están tratando de menospreciar la reputación de este hombre en el proceso para apoyar esta política. Esperamos con ansias nuestro día en la corte para resolver este mal", agregó el defensor del galeno.
