¿Mojas la sartén cuando aún está caliente? Te diremos una potente razón para no hacerlo

Cuando cocinamos, por más que la receta sea sencilla de realizar, solemos dejar una gran cantidad de utensilios de cocina acumulados en el lavaplatos, por ello, una de las técnicas que hacemos es dejarlos remojando, para que así sea más sencillo lavarlos. Sin embargo, hacer esto con algunos instrumentos que aún permanecen calientes, podría dañarlos. Si quieres saber el porqué, sigue leyendo la nota.

Nuestra primera opción luego de utilizar una sartén u ollas para freír o crear deliciosos guisos, es colocarla en el lavadero así siga caliente, dejando que el agua fluya para que las grasas o lo que se haya preparado allí no se quede pegada. Lamentablemente, hacer esto continuamente podría provocar que te deshagas de tus utensilios de cocina antes de tiempo.

Consecuencias de remojar una sartén cuando aún sigue caliente  

Cuando remojas un utensilio con agua fría cuando aún permanece caliente, ocurre un choque térmico que provoca que el material de cualquier objeto sufra una contracción. Esto se ve reflejado cuando el utensilio se abomba o se vuelve convexo. 

Por otro lado, el espesor o la calidad del material con el que está hecho el objeto es otro factor más que se debes tomar en cuenta, pues si la olla que usas es muy delgada o el material es muy sencillo, esta se dañará mucho más rápido. De igual manera sucederá si el utensilio es antiadherente.

Es por eso que si deseas mantener tus utensilios de cocina por mucho más tiempo, es recomendable invertir un poco más y conseguir algunos de una calidad superior. Sin embargo, más allá de la forma y componentes con los que está hecha la pieza, lo más aconsejable es esperar a que esta esté a temperatura ambiente para que recién la puedas remojar.

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