el corazón de Ricardo Gareca late al ritmo del Himno Nacional, está enamorado de nuestro folklore y su cariño por el país es admirable. Pese a ello, el argentino decidirá su continuidad en las últimas cuatro fechas de Eliminatorias.
Si bien el “Tigre” siente comodidad en el banco bicolor, cuenta con el respaldo del público y la oferta de la FPF se cae de madura, los resultados determinarán si acepta la renovación o decide cambiar de rumbos.
Por la cabeza del DT pasa dejar una identidad de juego que pueda ser plasmada desde las canteras, pero los resultados también mandan y el factor anímico jugará un partido aparte en la decisión de su futuro inmediato. Los seis puntos ante Bolivia y Ecuador son innegociables, serán el punto de partida. Ante Argentina y Colombia jugará al todo o nada.
Con vínculo hasta diciembre, el seleccionador evaluará su futuro al final del proceso. ¿Si no clasifica al Mundial? Igual negociará con la directiva encabezada por Edwin Oviedo.•