Uno de los grandes eventos de la Dragon Ball Super fue el Torneo de la fuerza en la última parte de la serie. Después de un mucho tiempo, los fanáticos podrían ver a Gokú enfrentarse a los personajes tan o más fuertes que él. Los capítulos semana a semana se iban poniendo más interesantes y épicos, pues los peleadores más poderosos se mantenían sobre la plataforma.
Jiren, el peleador más fuerte del universo 11, había logrado contrarrestar los ataques en conjunto de Gokú, Freezer y Número 17. Sin embargo, no contó que Gokú y Freezer pelearan palmo a palmo para derrotarlo.
El único que se quedó de pie sobre la plataforma fue Número 17, por ello, resultó ser el ganador de la competencia. Ahora, este personaje, tenía que pedir su deseo al Super Shenlong dorado.
Aunque, en un principio, tenía pensado pedir un viaje por crucero con su familia, cambió de decisión luego de ver como los demás universos desaparecían. Su deseo fue que todo vuelva a la normalidad, algo que fue aprobado por Gokú.
Una vez que Número 17 pidió su deseo, El Gran sacerdote se acercó a los ganadores y les dijo que Zeno-sama había predicho el final del Torneo. Ante ello, Bills le hizo la pregunta que todos los fans querían saber ¿Qué hubiese pasado si Número 17 pedía otro deseo? La respuesta es sencilla, Seno-sama hubiese aniquilado todo los universos de verdad.
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