El Perú despertó este martes con una triste noticia: dos ciudadanos perdieron la vida tras caer a un pozo de 35 metros de profundidad en el distrito de Ate Vitarte. El hecho se registró en un taller ubicado al altura del kilómetro 12.8 de la Carretera Central.
En ese sentido, el jefe territorial del Cuerpo de Bomberos, Mario Casaretto, confirmó la muerte de ambos jóvenes e indicó que los hombres de rojo continúan laborando para recuperar los cadáveres.
"Dos personas han caído a un pozo, aproximadamente entre 35 a 40 metros de profundidad. Ya se ha hecho la verificación y ambas personas se encuentran cadáveres. Estamos tratando de que el fiscal pueda generar su llegada al lugar", explicó Casaretto.
En diálogo con Canal N, el integrante de Bomberos remarcó que se tiene que investigar si es que las víctimas, que realizaban trabajos de limpieza desde hace días, contaban con las medidas de seguridad para ejecutar este tipo de labor.
"El monóxido que se respira en este tipo de pozos generan estos problemas de asfixia. La situación es lo que casi siempre se ve por un tema de descuido, negligencia no calculamos los temas de los gases que tienen las partes subterráneas", manifestó Mario Casaretto.
Por su parte, la madre de uno de los fallecidos señaló que su hijo, identificado como Luis Miguel Tarazona Cárdenas (35), había sido contratado para desarrollar labores de mantenimiento en dicho pozo. "Desde hace dos días viene trabajando en este pozo, desconozco si contaba con los implementos de seguridad. El señor Arturo, quien es el contratista, debe de saber", reveló la progenitora.
