La campaña de vacunación contra la COVID-19 inició este martes 9 de febrero en Perú. Durante la primera jornada de inmunización, más de 3 mil trabajadores del personal sanitario recibieron la primera dosis de la vacuna de Sinopharm.
En ese sentido, Carlos Santillán, director del hospital San Bartolomé, no ocultó su emoción al ser inmunizado. "Yo quisiera sinceramente decirles que me hubiera gustado que esta vacuna que me han aplicado, se la hubieran aplicado a mi mamá o a mi hija o a mi hermana", sostuvo.
En diálogo con Latina, el profesional de la salud remarcó que "es importante que todos aquellos (médicos) seamos vacunados para atender (a los pacientes) y no contagiarse".
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Asimismo, el director del hospital San Bartolomé aprovechó para recordarle al pueblo peruano que debe seguir las recomendaciones sanitarias, como el lavado de manos, el uso de la mascarilla, entre otras.
"Todavía falta la segunda dosis para que esté protegido en unos días más. Es importante saber que aun cuando me haya vacunado tengo que seguir utilizando la mascarilla, lavándome las manos, quitándome la ropa y lavarla de inmediato, para que aquella persona que no esté inmunizada yo no la pueda contagiar o llevar en la mano el virus", explicó.
Por otro lado, Carlos Santillán reconoció que el estrés fue un factor común entre sus colegas desde el comienzo de la pandemia. "He visto a las personas más fuertes que he podido conocer en manejar pacientes graves, críticos de siempre, prácticamente llorar y llorar, pero se secaban sus lágrimas y seguían atendiendo", manifestó.