Ron DeSantis apoya estos proyectos de ley para proteger a floridanos de la manipulación no autorizada del agua pública
El gobernador de Florida apoyó dos leyes que impiden la fluoración del agua sin el consentimiento local y la alteración del clima a través de geoingeniería.
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El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha mostrado su apoyo a dos nuevas leyes que buscan prohibir la fluoración del agua sin el consentimiento de las comunidades locales y la geoingeniería. Estas iniciativas tienen como finalidad proteger tanto la salud pública como el medio ambiente, al tiempo que reafirma el compromiso con la autonomía local.
Ron DeSantis apoya estos proyectos de ley para proteger a los floridanos
De acuerdo con un comunicado de prensa, la Cámara de Representantes de Florida aprobó, con un amplio respaldo, el proyecto de ley SB 700, que impide la adición de fluoruro al agua potable, restringiendo el uso de ciertos aditivos en el sistema hídrico. Por otro lado, la ley SB 56 prohíbe la geoingeniería, evitando que el estado emita permisos para la manipulación del clima.
Ambas normativas refuerzan la filosofía del "Estado libre de Florida" y destacan la relevancia del consentimiento local en decisiones que afectan a la comunidad.
Florida prohíbe la fluoración del agua potable
La SB 700, aunque no menciona directamente el fluoruro, establece restricciones que lo prohíben al impedir el uso de ciertos aditivos en el agua. Si el gobernador DeSantis firma esta ley, Florida se convertirá en el segundo estado en prohibir el fluoruro, siguiendo el ejemplo de Utah, que ya ha implementado una medida similar.
Los legisladores que apoyan esta iniciativa argumentan que el flúor no mejora la calidad del agua y que su eliminación podría generar ahorros para los gobiernos locales. Sin embargo, los opositores sostienen que muchos floridanos dependen del fluoruro para mantener su salud dental. DeSantis, en su defensa de la ley, afirmó: "No hay necesidad de medicar a comunidades enteras sin su consentimiento".
Prohibición de la geoingeniería
La SB 56 establece una prohibición clara sobre la geoingeniería en Florida, penalizando la dispersión de sustancias químicas en la atmósfera con el fin de modificar el clima. Las sanciones por violaciones pueden incluir hasta cinco años de prisión y multas de hasta 100,000 dólares, clasificadas como delitos de tercer grado.
El gobernador Ron DeSantis enfatizó que Florida no será un campo de pruebas para la geoingeniería, reafirmando su compromiso con la protección del medio ambiente y la salud pública. La ley también incluye mecanismos de vigilancia, como la obligación de los aeropuertos públicos de reportar la presencia de aeronaves equipadas para modificar el clima.
Un paso hacia la autonomía local
Estas leyes reflejan un esfuerzo por parte del gobernador DeSantis para fortalecer el control local y proteger a los ciudadanos de intervenciones tecnológicas no aprobadas. La narrativa del “Estado Libre de Florida” se refuerza con estas iniciativas, que buscan garantizar que las decisiones que afectan a la comunidad sean tomadas con el consentimiento de sus miembros.
Con la implementación de estas leyes, Florida se posiciona como un líder en la defensa de la autonomía local y la salud pública, marcando un precedente en la política estatal y nacional.
