La incontrolable furia del delantero del Shanghai Shenhua, Demba Ba, fue más que elocuente en el encuentro frente al Changchun Yatai por la jornada 16 de la Superliga China.
Una jugada fortuita - al minuto 76 - del senegalés con Tan Tiancheng desencadenó una gresca entre el exatacante del Chelsea y el volante de 28 años, Zhang Li. Este último acusaba al africano de ser el causante de la aparatosa caída de su compañero. El juego se reinició y parecía que el reclamo quedaría en el olvido, sin embargo, no fue así.
Las cámaras de transmisión del torneo chino enfocaron a un ofuscado Demba Ba, quien - al parecer - señalaba al futbolista chino de emitir comentarios raciales en su contra. El paraguayo, Óscar Romero, intervino y decidió separar al exseleccionado senegalés. Incluso, el capitán de la visita, Cao Yunding, también quiso poner paños fríos al asunto pero Zhang Li continuaba vociferando.
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Tuvo que llegar el delantero nigeriano, Odion Ighalo, para calmar el ánimo de Demba Ba. El diálogo entre ambos fue importante a fin de que terminar con el incidente. Los árbitros asistentes como de los miembros del comando técnico del Shanghai Shenshua también se hicieron presentes. Una gran polémica desatada en China, el cual fue condenada por el Shanghai Shenshua a través de su cuenta oficial de Twitter.
EL DATO
El delantero brasileño, Hulk, fue el primer caso de racismo en la Superliga China.