DTP_23_PICHANGUERO LINA110217_23 2017-02-11

ES HORA DE DISPARAR... Qué tal causitas. En la crema no pasa la bronca por la vergonzosa derrota ante Capiatá. Todos se tiran la pelota por el resultado que puso al equipo en una crisis similar a la que se vivió en la época de Pachueco y sus estrellas. Solo que aquella vez el chupo reventó a mitad de año y ahora las cosas se han puesto feas de arranque. El dilema es saber si el club podrá mantener la costosa planilla, pues así como están las cosas los hinchas van a dar la espalda y no habrá ingresos por taquilla. ¡A la mela! Así arrancamos con las últimas de nuestra pelotita.

Quien parece que pagará los platos rotos es el Tío Chela. Le dieron a manejar un auto nuevo y en la primera lo estrelló contra un poste. El hombre es ídolo del club, lo ha sacado campeón, lo ha salvado de la baja, pero parece que ya no da para más en el banco. El grupo le ha quedado demasiado grande y todo indica que si no gana el clásico le dirán “buenas noches los pastores que llegaron a Belén”. ¡Curuju!

Ese tono al que asistieron el Loco, Tyson y Manzanita sigue sacando pica a los de la Trinchera, quienes se quejan de lo poco concentrado que estaba el plantel en la previa con Capiatá. Dicen que hay una manchita que tiene carta libre para entrenar cuando quiere y para no descansar si es que lo desea. El relajo pasó factura y si las cosas no cambian se tendrán que ir olvidando del campeonato. ¡Buaaaaa!

Los más felices con el mal momento de los cremas son los grones, quienes se sienten seguros de ganar el clásico de mañana. El Profe ya tiene listo su once y a sus más allegados les ha comentado que mínimo le meterás tres pepas al compadre. Guarda que se pasan de confiados y les terminan dando un baile en su casa. ¡Así es!

BUENO MI TEGEN, soy fuga. Mañana vuelvo con fuerza. ¡CHAUFA!