¡Clausurado!

Le metieron llave y lo empapelaron. Se hizo efectiva ayer la clausura temporal del estadio Monumental hasta que culminen las investigaciones por la muerte del hincha de Alianza Lima, Walter Oyarce Domínguez, quien fue empujado presuntamente por barristas de Universitario desde un palco.

El alcalde de Ate, Óscar Benavides, quien reiteró que el coloso deportivo no tenía licencia de funcionamiento, aseguró que existe un documento fechado el 15 de setiembre en el que autoridades del club aseguran que sí se hacían responsables de la seguridad del clásico del sábado pasado.

“El club Universitario de Deportes se compromete a velar por el evento deportivo en mención respetando el orden interno del espectáculo”, dice el oficio firmado por Fernando Enríquez Acosta, administrador del estadio.

Sin embargo, cabe recordar que los palquistas descartaron su responsabilidad en la muerte del hincha. Además, el presidente de la “U”, Julio Pacheco, deslindó también cualquier compromiso, pues señaló que los palcos son propiedad privada.

Lo cierto es que un cordón de veinte policías y treinta serenazgos rodearon el recinto de Ate desde las 6 de la mañana. Hasta allí llegaron la Fiscalía, Dinincri y los jugadores tuvieron que dejar sus vehículos en la calle para poder entrenar en la cancha principal del estadio.

Con esto, la “U” tendrá que jugar los tres últimos partidos como local en el Descentralizado, ante Sporting Cristal, Inti Gas y César Vallejo, además de la revancha en la Sudamericana ante Godoy Cruz, en el estadio Miguel Grau del Callao.