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Camino al cielo

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El problema sería enterrar la promesa. Y si bien ayer hubo una pequeña roca en el camino que dejó heridas, los rimenses están cerca del objetivo: disputar la final.

Y es que con un empate en la próxima fecha (ante Cobresol en Lima), los celestes lucharán por el título con el ganador de la liguilla “B”. Sumarían 73 unidades a cinco fechas del final.  Aunque, claro, todavía hay cosas por corregir, por analizar.

Ello se vio sobre todo ayer, cuando los dirigidos por Roberto Mosquera cayeron 3 a 1 ante Sport Huancayo en el IV Centenario. Una cachetada al orgullo, al “Extremo” de un corazón.

Desde el arranque los locales salieron con la escopeta en la mano. Blas López y Ryan Salazar inquietaban con disparos de larga distancia. ¡Infernales!Bajo la regla de la presión llegaron los dos primeros de la gente de Wilmar Valencia. Centro al área y Andrés Formento cantó el primero a los 22 minutos. Ojo, fue con el hombro. Igual entró.

Algo similar llegó a los 40’, con un remate secó de José “Tierra” Mendoza. Los del Rímac, ayer de blanco, sentían que estaban en penitencia.

EL “MATAMOSCAS”

Lo de la segunda mitad fue caótico para los bajopontinos. Ávila descontó a los 53’. Sin embargo, Hernán Rengifo fallaba en dos ocasiones lo que pudo ser el empate. Fue cerca, pero ya dicen que con eso no es suficiente.

Porque a los 93’ Mimbela marcó el tercero para los rojos. Que lo de ayer sea un hecho aislado. Todavía hay una promesa en el aire: que no se esfume el sueño porque el título está cerca.

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