Duros de matar

Es cierto cuando dicen que los puntos, en este caso el título, están por encima de cualquier duelo individual. Sin embargo, es imposible no colocar sobre la balanza a Germán Pacheco y Sergio Blanco para el play off de este domingo.

El jugador de Juan Aurich demostró que es un monstruo con el balón detenido. Todo lo que toca lo transforma en gol. Su zurda es demoledora. Lo de Blanco más pasa por vivir y respirar dentro del área rival.

“La verdad es que en una final nada está asegurado, tenemos que aprovechar este primer partido porque lo vamos a jugar en nuestra cancha”, mencionó Pacheco.

“Chapita”, por su parte, expresó: “El grupo está muy fuerte y tiene claro que hoy más que nunca el objetivo es conseguir el triunfo. Eso está en nuestra mente”. Se viene una verdadera guerra.