¡Fue a tres dedos!

El panorama es oscuro en nuestro balompié, pero Carlos Lobatón parece ser la luz. De la nada dejó a todos con la boca abierta. Ayer a los 36 minutos sacudió a tres dedos el esférico y se mandó con una pepaza. Olímpico del capitán rimense.

Diego Morales, arquero de Cienciano, esperó el centro para salir a cortar y dejó un espacio que fue aprovechado por el mediocampista celeste. Los compañeros hicieron una montaña sobre “Loba” y la felicidad fue extensa.

“En ese momento el arquero había dejado su palo. La pelota estaba ahí, decidí pegarle directo”, sostuvo Lobatón, quien siente que aún le faltan dos tantos de lujo.“Me faltan hacer goles de chalaca y de taco”, agregó entre risas. Cuando el Cristal no brilla, lo hace la derecha de Carlos Lobatón.