El otro Dakar: Detrás de esta imponente carrera ocurren hechos de nunca olvidar [FOTOS]

¿Cómo sobrevives en el desierto durante 15 días? A diferencia de otras realidades, el Dakar cubre todas las necesidades de los pilotos. En los bivouac o campamentos gigantes, los camiones de auxilio se encargan de calmar la sed, el hambre y el sueño de los más fuertes.

No es un hotel cinco estrellas, con jacuzzi, pero alcanza para curar heridas y analizar la ruta. El calor que los atrapa en plena carrera es combatido con filtros. No hay tiempo para el baño, así que se utilizan sondas.

En los descansos, la comida no es gourmet y se come lo justo para mantener el espíritu de lucha. Ese es el Dakar, con sus locuras y muestras de solidaridad siempre presentes.

Pollito con papas. la comida peruana fue la delicia de los pilotos que visitaron nuestro país en ocasión del Dakar 2012.

Soñando en grande. Cuando el sueño te atrapa, es mejor dormir. No se puede retar al desierto con los párpados cansados.

¡Viva el Perú! Siempre hay un peruano decidido a prestar ayuda al más necesitado. Aquí, luchado para salvar la camioneta.

Hamaca de colección. Dos mecánicos descansan a placer. La etapa ha sido muy dura y solo quedan recobrar fuerzas.

Los bivouac. Así se les conoce a los enormes campamentos que se levantan en el desierto para darle alivio a los pilotos.

Amigos míos. Un grupo de pilotos se dan ánimos luego de dejar parte de sus vidas en el desierto. La amistad es a prueba de todo.

Caminando en el desierto. Su carro se malogró y urge el auxilio mecánico para ponerlo nuevamente en carrera. ¡La locura! Este es el rally de todos.