¡Respeto! Antony dedica gol a joven africano torturado por milicianos brasileños

Figura en la cancha y ejemplo fuera del verde, el joven Antony de 21 años sabe la realidad que vive en su país y el gol que convirtió con Brasil ante Paraguay lo terminó dedicando a la familia de Moïse Kabagambe, joven congolés de 24 años que fue asesinado a golpes en Río de Janeiro el pasado 24 de enero. Este homenaje y protesta llegó vía redes sociales del mismo jugador del Ajax de Ámsterdam. Tremendo lo del jugador del 'Scratch'.

"A ti, Moïse! Nuestros pensamientos contigo y tu familia" escribió Antony en su cuenta personal de Twitter con el hashtag #JusticaPorMoiseMugenyi.Con esto busca llamar la atención del caso que al parecer en Brasil parece olvidado, la última noticia sobre el caso es que la Policía de Río de Janeiro investiga el caso de la muerte del extranjero y quiénes serían los responsables.

Se indica que los milicianos de Brasil atacaron a Moïse Kabagambe en el quiosco de Tropicália en Barra da Tijuca un lujoso barrio de Río de Janeiro. La familia dio a entender que el joven trabajaba ahí y fue a cobrar un dinero pero que luego fue atropellado y golpeado con bates de béisbol. Hay 3 sospechosos detenidos pero no más que eso, la acción de Antony no fue la única reacción que se dio en el fútbol.

Además equipos como Botafogo o Flamengo expresaron su protesta contra este vil acto y en la que exigen una dura justicia cuanto antes. "El Clube de Regatas do Flamengo lamenta profundamente la muerte de Moïse Kabagambe y ofrece su solidaridad a la familia del joven congolés en este momento de total consternación", escribieron en las redes de Flamengo.

Botafogo, un club protagonista por el bienestar social, mostró rechazo total contra la muerte del joven trabajador: "Botafogo lamenta la muerte del joven congolés Moïse Kabagambe. El club apoya la investigación de los hechos de este brutal crimen para que haya justicia. Situaciones de miedo como esta no pueden pasar".

Estos episodios de racismo y xenofobia son totalmente condenables en esta globalización. Moïse Kabagambe llegó a Brasil junto a su familia en el año 2011, todos en condición de refugiados. 11 años más tarde fue asesinado por 200 reales que le debían producto de su trabajo. un familiar habló sosteniendo que "Una vergüenza, mi hijo amaba a Brasil. Moise tenía todos amigos brasileños, trabajaba muy bien en la playa desde muy joven. Los brasileños mataron a mi hijo, a nosotros que escapamos de la guerra."