GraciasSeñor

su rostro el viernes, una vez que conoció la noticia de Guerrero, era el lógico. Perdía a su principal arma de ataque y líder para el repechaje. 24 horas después, y obedeciendo al viejo adagio que dicta que “la vida continúa”, Ricardo Gareca volvió a su semblante sobrio de siempre.

El argentino, más allá de la afinidad que ha sabido cultivar con el “Depredador”, sabe que no puede hacer otra cosa sino mirar el futuro y terminar de preparar a su plantel para el primer partido por el repechaje.

Las risas y bromas del grupo durante los trabajos de ayer fue la respuesta positiva que esperaba el estratega. Fue el guiño frente a la situación adversa, fue la contestación de que la plantilla no ha perdido de vista el objetivo.

PIENSA ENTRE REDES

Los días que queden de acá hasta el viernes servirán para que Gareca defina quién irá en reemplazo del capitán, pero para todo hay su momento. Tras los trabajos sabatinos, el “Tigre” y su comando técnico decidieron jugarse un partidito de fútbol-tenis. ­

Sus fieras siguen mostrando sus colmillos y él se lo agradece de corazón a la providencia. •