Fruto prohibido

No es momento de caer en sentimentalismos. De conmoverse y saber que de por medio está la familia. Pero John Galliquio no está para hacerse el harakiri en un lugar donde lo maltratan y lo hacen sufrir por el tema económico

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Por eso, “Tyson” mira su futuro diferente. Espera impaciente que se resuelva su posible transferencia al Necaxa de México, club que había enfriado el negocio por la fiebre del Mundial.Galliquio no está conforme en la “U”. ¿Los motivos? Dirigencial y económico. Por eso, mira otros rumbos. Allegados al jugador comentaron que si se cae lo de México, cruzaría el charco para caer en La Florida.La idea no es descabellada, pues los celestes tienen una defensa horrorosa y su llegada caería bien. Para ello su representante debe conversar con currículum en mano para que se concrete, por eso, Galliquio podría jugar la liguilla en el Rímac y eso le fascina.De otro lado, ante la falta de pagos, el equipo no concentraría como rebeldía para el choque ante CNI.