Cayó en desgracia

La confianza genera confianza, pero en exceso puede jugar en contra porque no se gana un partido antes de jugarlo. Los íntimos recibieron un duro golpe de un sorpresivo Sport Huancayo que se mostró superior para imponerse 2-0.

Los huancaínos tuvieron una mejor lectura del juego para aplicar un planteamiento con un inicio conservador, pero que fue efectivo para llevarse los tres puntos al neutralizar los circuitos de los blanquiazules.

Los grones pecaron de confiados porque no supieron capitalizar las opciones de gol que generaron con mucho desorden. Los huancaínos esperaron en su campo para contragolpear con un inspirado Irven Ávila, quien fue una pesadilla para Leandro Fleitas y Carlos Solís porque nunca lo frenaron.Hasta que llegó el baldazo de agua fría a los 16’ en un tiro libre cobrado por Blas López que encontró a un astuto César Ortiz que le ganó en el salto a Amilton Prado para meter un frentazo que colocó el 1-0.

Los grones parecían extrañar a su goleador el paraguayo Roberto Ovelar, quien finalmente fue guardado por precaución, pero Cristofer Soto no fue la solución porque las pelotas le llegaron poco.

No aparecieron las sociedades entre Johnnier Montaño y Jorge Bazán, además de un improductivo Joazinho Arroé. En medio del desconcierto creció Huancayo y la figura de Ávila, quien a los 59’ hizo una bonita pared con López para sentenciar con un golazo el 2-0 que avivaron los fantasmas en Matute.