¡Sonámbulos!

Ya dicen que con el sueño no se juega. Y ello hoy más que nunca lo tienen clarito en Sporting Cristal, sobre todo después del Vía Crucis que vivieron para llegar a Huancayo.

¿Qué pasó? Sucede que desde las tres de la mañana de ayer  los rimenses llegaron –con almohaditas en mano– hasta el aeropuerto. Por mal tiempo el vuelo se suspendió para las seis de la mañana. Y es que estaba programado para el sábado en la tarde.

Llegaron dos horas después a Huancayo y solo pudieron pegar el ojo por una hora y media. Como en la escuela militar. Con las mismas se despertaron y fueron a jugar.

“Es jodido cuando uno no duerme bien, hasta yo no dormí bien. A pesar de ello solo me queda felicitar a mis jugadores por el partido que hicieron”, sostuvo el técnico Roberto Mosquera.

Por su parte, Irven Ávila sacó la navaja e indicó: “Estuvimos  desde las tres de la mañana despiertos y así es complicado. No hemos descansado como se debía”.

Cosas del destino. Parece que eso les jugó una mala pasada.