¡Fuerza vencedora!

En un terreno repleto de piedras, lo más difícil es mantener al “cristal” entero. Este se puede ensuciar, pavonar por momentos, pero no hay problema: no está roto. Y hasta que no ocurra lo contrario, la ilusión de que llegue a su destino está intacta.

Los rimenses se sacudieron de un inicio titubeante, y derrotaron 2-1 al Atlético Paranaense en el partido de ida de la primera fase de la Copa Libertadores. Un encuentro donde el sufrimiento quedó enano.

Los bajopontinos a los cuatro minutos dibujaron lo que se vería en grandes pasajes del compromiso. Yoshimar Yotún no pudo definir frente a Weverton. Cerró los ojos y se “congeló” con sus fantasmas.

El equipo de Daniel Ahmed no aprovechaba las licencias de  la visita y el tiempo corría como un venado alejándose de la fiera. Recién a los 29’,  Ávila abre el marcador, de remate seco rompe las redes del Paranaense. 

Para la segunda mitad el duelo dejaría sin uñas a todos en el Nacional, con el corazón al ritmo de una licuadora. Tanto que Éderson decretó a los 55’ la igualdad. De penal. La “Calavera” Calcaterra salió en mal momento de su ataúd y pecó de inocente.

Las miradas iban como balas sobre el “Turco”.  Era la historia de siempre...”estuvimos cerca, pero...”. Felizmente esta vez no se cantó ello sobre el final. Porque Lobatón, a los 83’, puso el segundo definitivo desde los doce pasos.

En hombros estuvo “Loba”, quien desde lo alto vio que el pase al grupo de la “U” en este torneo no es inalcanzable. Ahora hay que partir a Brasil, no hay que fallar lo que se falló ayer y creer que esta historia sí puede tener un final feliz.•