¡Siente mi puño!

Alianza Lima es un solo puño. Un sentimiento solemne que se congracia con la unidad, la solidez y la fuerza. Walter Ibáñez y Wilmer Aguirre son dos exponentes de esta nueva faceta blanquiazul. Ambos viven con el gol y aman al club.

El uruguayo clava goles de cabeza y de penal. Además, es un recio guardián de la zaga grone. Un guerrero que de a poquitos se ganó su “tela” en el Comando. Está encantado con Lima y quiere ser eterno.

El “Zorrito”, como buen artillero, explota su velocidad. Es agresivo cuando pisa el área y todo lo ve arco. Y, al igual que el “Colo”, vacunó en la valla del Unión Comercio en el merecido y sufrido triunfo por 2-0.

“Tenía muchas ganas de anotar y por fin pude hacerlo. Como delantero vivo del gol, es mi función y trabajo para estar en el área y aportar. Espero que la racha continúe así”, nos dijo Aguirre al pie del cañón.

“Ahora se viene Inti Gas, un equipo al que debemos ganar en la altura. Felizmente no me afecta y sé cómo desempeñarme. Iremos por el triunfo, por los tres puntos”, agregó el “Zorrito”.

El charrúa Ibáñez camina a convertirse en ídolo y a meterse en la historia del club. “Uno trabaja para ser considerado en el equipo y cumplir con los objetivos propuestos”, comentó.

“Quiero mucho esta camiseta. Las cosas están saliendo bien porque ganamos, pero apuntamos a conseguir el título nacional”, dijo el “Colo”.

Ibáñez es feliz y ya lleva 19 goles en su historial con la blanquiazul en el pecho. A roto los esquemas en Matute y es el defensor extranjero con más goles en la histotia del club.