Dragon Ball Super: el día que Zenosama salvó a los guerreros del Universo 6

La aparición de Bills en Dragon Ball Super, nos dejó claro que Gokú no era ser más fuerte del universo y que este era más grande de lo que imaginábamos. Nuestro protagonista, con la ayuda de sus amigos, pudo convertirse en Super Saiyajin Dios, sin embargo no logró no logró vencer a la deidad. Por lo que, después de varios intentos, le pidió a su mano derecha, Whis, que los entrenara con la finalidad de hacerse más fuerte.

Noticias sobre Dragon Ball Super

• Dragon Ball: el secreto de los androides 17 y 18 es revelado
• Dragon Ball Super: cómo se encuentra Gokú luego de pelear con Granola
• Por qué Yajirobe fue el único sobreviviente en el futuro de Trunks
• El día que Freezer fue humillado por el Universo 11 de Dragon Ball Super

Luego de que Gokú y Vegeta fueran a entrenar con el señor Bills a su planeta, conocieron al hermano gemelo del dios. Este también era un dios de la destrucción, pero de otro universo. Las deidades que competían desde tiempos inmemorables por saber que universo era el mejor, tuvieron la idea de hacer un torneo con los cinco guerreros más fuertes fuertes.

El torneo se llevó a cabo. Gokú encabezaba al equipo del universo 7, mientras que Hit, un guerrero con habilidades desconocidas, hacia lo mismo con el 6. Las peleas fueron una pequeña muestra de los que se venía en la serie. Vegeta se enfrentó a otro saiyajin llamado Kyabe, Piccolo los hizo con Frost, la versión de Freezer del otro mundo. Pero la fuerza y la nueva transformación de Kakaroto en su fase Blue se llevó la victoria.

Champa, el dios de la destrucción del universo 6, no soportaba haber perdido ante su hermano, por lo que amenazó de muerte a Hit y a los demás guerreros. Nuestro protagonista quiso intervenir, pero Bills le dijo que no entrometiera. Sin embargo, la presencia de un pequeño ser alertó a los dioses, era Zenosama. El ser más poderosos de los universos, estaba molesto porque no le habían pedido permiso para organizar ningún torneo. Los hermanos pidieron disculpas y los guerreros perdedores no murieron.