El día que 'Churrito' Hinostroza rompió a la defensa brasileña con la Selección Peruana

La Selección Peruana ha visto desfilar a grandes promesas por sus convocatorias. Hoy, recordaremos a una de ellas, que en su momento, se perfilaba como el 'salvador' del mediocampo, que ayudaría a la 'Bicolor' ha posicionarse como una de las potencias sudamericanas; sin embargo, las malas decisiones lo han posicionado hoy en la segunda división del Perú.

Su nombre es Hernán Hinostroza, pero para los que disfrutamos del Sudamericano Sub 20 de 2013 se nos hace más familiar el 'Churrito', debido a que su padre tuvo insidencia en Alianza Lima durante la época de los 90's con el apodo del 'Churre'.

En aquella época el jugador también tenía un presente importante en las divisiones menores de los blanquiazules y gozaba de tener calidad para ser ascendido al primer equipo. Peru su momento de 'gloria' llegó en la última fecha del Grupo A cuando la 'Bicolor' se jugaba el pase al hexagonal final frente a Brasil.

A pesar de no ser un reincidnete titular Daniel Ahmed apostó con la agilidad mental del entonces poco conocido internacionalmente volante creativo, que ya venía con rodaje de la Copa libertadores sub 20 2011, pero que creaba dudas por su cuestionable estado físico.

Lejos de defraudar, el 'Churrito' fue clave en la victoria de la 'Blanquirroja' por 2-0 y dejó cuotas de su viveza, que era oriunda del barrio donde creció. En aquel partido tuvo un festin de 'tacos' y jugadas creativas, que dejaban atónitos a los 'cariocas' que eran incapaces de seguirle el ritmo. No solo eso, sino que la victoia incaica eliminó a Brasil del certamen, lo que significó una deshonra para los pentacampeones.

Tras esa gran anécdota, Hernán tuvo otras oportunidades con el seleccionado nacional; sin embargo, aún queda en la retina de los que vivimos la esperanza de que Daniel Ahmed y compañía clasificaran, esa buena actuación del deportista que incluso era voceado por CMD para Ajax o PSV de Holanda. Perú no pudo clasificar a la Copa del Mundo Sub 20 2013, pero nos dejó el gusto agridulce de lo que hubiera sido la carrera de una promesa.