Baldazo de agua fría para el Barza, que cayó goleado por 4-0 ante el Liverpool en un amistoso jugado en Wembley. El fútbol ultraofensivo de los “reds” terminó por anular a Messi y sacó a relucir los “horrores” defensivos de los culés, que dejaron dudas de cara a la Supercopa de España ante el Sevilla.
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En el primer tiempo, y con Ter Stegen bajo los tres palos, los de Luis Enrique sufrieron el látigo de un equipo con el sello de Jürgen Klopp que vio puerta apenas a los 15 minutos gracias a Sadio Mané asistido por Lallana.
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En la segunda mitad, Claudio Bravo entró en acción, pero la poca conexión entre Mascherano y Mathieu (en reemplazo de Piqué) contribuyó al autogol del argentino a los 47’ y los posteriores goles de Origi a los 48’ y Grujic que sentenció sobre el final (93’).
La imposibilidad de Suárez y Messi para marcar ante un equipo igual de ofensivo pero ordenado atrás, y los despistes en la transición defensiva, siembran dudas sobre el verdadero potencial de este equipo.
Es la segunda vez, en la era Luis Enrique, que el Barza cae goleado 4 a 0. La anterior fue en la ida de la Supercopa de España contra el Bilbao en 2015.
EL DATO
“El Barza no estuvo tan mal. Ahora no pensamos que somos mejores que ellos, no estamos locos”, disparó Klopp.
