Zenit San Petersburgo se proclamó bicampeón de la Premier League Rusa

Por Lorenzo de Chosica, corresponsal especial de Líbero en Rusia

La trigésima jornada de la Premier Liga de Rusia (PLR) que se disputó el 25 de mayo, puso el punto final a la temporada 23/24. Sin hacer abuso de emociones subjetivas, la que acaba de finalizar, fue una temporada única en Europa – y que -al otro lado del océano Atlántico- tan solo podría compararse con el torneo Apertura de la Liga 1 peruana ganada por Universitario de deportes, justamente en la última fecha, por diferencia de goles sobre el Sporting Cristal.

El grado de intriga que se conservó hasta el último minuto en cinco de los ocho encuentros jugados, incluía tanto a los pretendientes al medallero, como a los equipos que se aferraban a la élite del fútbol ruso.

Como lo dicta el reglamento, todos los encuentros fueron disputados paralelamente, a partir de las 16:30, hora Moscú (6:30, hora Lima).

Si bien es cierto que el Zenit San Petersburgo conquistó por sexta vez consecutiva el campeonato, esta vez no le fue fácil hacer la tarea. Necesitó de dos detalles importantes:

Seguidamente les ofrecemos un resumen del llamado ‘Match Day’, que se disputó en la ciudad de sureña de Krasnodar.

FC Krasnodar – FC Dínamo

Si hay un equipo que tenía y -en opinión de la mayoría de especialistas, merecía hacerse de la de oro- era el FC Dínamo Moscú. ¿La razón? - El formidable levante que había experimentado en las seis últimas fechas, obteniendo sendas victorias de visita: ante el Parí Nizhny Nóvgorod (1-4), ante el FC Orenburg (1-2) y ante el FC Báltica (2-3); en casa: sobre el FC Zenit SP (1:0) sobre el FC Sochi, por 3:2; y, finalmente, sobre el Krillia Sovétov (4:1). Es por ello que, en la víspera de la jornada final, los dinámicos moscovitas se ubicaban como líderes absolutos de la tabla de posiciones, con 56 puntos, lo seguía el ‘ahijado’ del Consorcio Gasprom, con 54, mientras el FC Krasnodar estaba tercero, con 53 puntos acumulados. Ahora, a los herederos de Lev Yashin les bastaba con tan solo empatar de visita ante los ‘toros’ rusos, y así, después de 48 años de sequía triunfal, llevar al éxtasis a sus hinchas. Pero, bien dice el dicho: ‘El hombre propone, Dios dispone…’

Los directivos del club dinámico organizaron una formidable co-visión del encuentro en el ‘Palacio del hielo’, situado dentro del estadio ‘VTB Arena’, a la cual asistió también el autor de la presente crónica. Es en este hermoso recinto, en el que el equipo de Hockey de los ‘dinámicos’ juega sus partidos como local.

A media hora del inicio, las instalaciones estaban prácticamente abarrotadas de bote a bote. La mayoría de los asistentes eran jóvenes y familias enteras, que calentaban el ambiente con sus ensordecedores gritos, arengando a su amado equipo. Los hombres de prensa podíamos llevar a cabo el reportaje desde cualquier punto de la arena de hielo, que esta vez estaba reemplazada por losetas de color blanco. En la pantalla súper gigante colgada detrás del campo de juego, se podía ver que los colegas de ‘Dínamo TV y ‘Match TV’ Dmitry Derunets e Yllia Shelogúrov, trasmitían amenos reportajes con otroras leyendas del equipo capitalino, analizando sus posibilidades de triunfo. A minutos del pitazo inicial del árbitro de turno – Serguey Karasiov- se oyó el himno del FC Dínamo, con todos lo hinchas cantando de pie. Eran emotivos instantes en espera de su punto de efervescencia…

El esquema táctico del profesor Marsell Lichka provocó preocupación, empezando desde el portero. ¿Confiar el arco a Ígor Leshuk, que con sus fallas garrafales había provocado dos derrotas de su equipo algunas fechas atrás? – Realmente incomprensible, cuando Antón Shunin, el experimentado guardameta de la selección rusa estaba apto para jugar. No en vano, a mi pregunta días antes hecha al mismo Antón Shunin sobre cuál era el motivo de que Lichka, lo tenía de suplente, me respondió: ‘yo estoy en óptimas condiciones. No entiendo por qué me deja de lado’. Otro detalle, que al final de cuentas fue el determinante en contra del Dínamo: ¿Cómo frenar al bombardero colombiano John Córdoba? Poner un solo central a su custodia era poco, por más efectivo que fuera el capitán Fabián Balbuena. Córdoba, con un descarado codazo en la nariz que no fue sancionado por el árbitro, neutralizó a Balbuena, que quedó sangrando y mermado psicológicamente. Krasnodar, como dueño de casa demostraba un fútbol atlético y agresivo, con disimuladas infracciones que Karasiov pasaba por alto. Los dinámicos se veían abrumados por el pressing, mientras su medio campo poco funcionaba con Carrascal inoperante y errando en varias ocasiones. En el 32’, Córdoba recibió un pase a profundidad, se proyectó al centro del borde del área grande y el balón rebotando en Fernández entró a la valla del Dínamo. El gol fue revisado y anulado por el VAR, debido a centimétrica posición adelantada del atleta colombiano. Eso lo enfureció enormemente.

En el segundo tiempo Krasnodar continuó asfixiando la defensa dinámica, ante la parmosidad del cuerpo técnico, que no se animaba a hacer cambios. En el minuto 52, el dueño de casa organizó un ataque relámpago por la banda izquierda. El lateral uruguayo Olasa pasó la pelota por entre las piernas de Balbuena, la sirvió a Córdoba, que recostándose en Chávez anotó el gol. Desde ese momento los ‘toros’ empezaban a sentirse campeones. Sin embargo, en el encuentro entre el FC Rostov – FC Zenit SP, el minuto 65, cambió el destino de la medalla de oro, gracias a un grave error del golkiper del Rostov, quien se anotó el gol (¡increíble, pero cierto!), que a la postre le dio el Triunfo a los de las orillas del río Nevá.

Dínamo se volcó al ataque como pudo, estrellando dos veces la redonda en los parantes del arco de Safónov, pero los remates finales resultaron defectuosos. Ngamalé también erró su chance, y el pitazo final de Karasiov resultó lapidante para ambos equipos. Una vez más el FC Krasnodar -habiendo liderado buena parte de la temporada- se quedó con la de plata. El FC Dínamo liderándola en la recta final se contentó con la de bronce. Bien reza el dicho popular: ‘En la puerta del horno se quema el pan …’.

El dramatismo del fondo de la tabla también fue frenéticamente resuelto. FC Orenburg empató con el desmotivado FC Spartak (0-0), y se alejó del repechaje. Parí Nizhny Nóvgorod ganó de vista el ansiado punto que lo posibilitó al repechaje. FC Ural perdió de visita ante el FC TSESEKA (0-2), y también jugará los encuentros de repechaje.

Los equipos que han descendido a la ‘Primera Liga’ son el FC Sochi y el FC Báltica.Entre los datos estadísticos más importantes de la temporada podemos citar los siguientes:

El sexto campeonato del FC Zenit, no ha causado gran alegría entre los hinchas rusos futboleros, pero eso ya es otro cantar. Apoyan su resentimiento en que son ‘los brasileños’ y no el club, el que ha logrado esos triunfos. Pero señores, el reglamento permite a cada club enviar al campo de juego hasta 8 jugadores extranjeros. Zenit lo puso en práctica al máximo, comprando con la ayuda de su ‘padrino’ GazProm, a jugadores brasileños y colombianos de renombre mundial. Eso, sumado al gol que anotó en su propia valla el arquero del FC Rostov, y que fue el victorioso para los pupilos de Serguey Semak; les funcionó a las mil maravillas. No en vano dicen en ruso: ‘La suerte está del lado del fuerte’.

Los partidos de repechaje se llevaron a cabo entre el 29 de mayo y el 1 de junio. Los nuevos inquilinos de la PLR son: FC Akrón y el FC Dínamo Majachkalá.

La Súperfinal de la Copa de Rusia se jugó el domingo 2 de junio, en el estadio olímpico moscovita Luzhnikí, repleto de bote a bote.

El séxtuple campeón ruso -a pesar que iba como favorito, ante el colero FC ‘Báltika’, que descendió a la Liga 1- las vio difícil, hasta el minuto 81.

Para sorpresa y deleite del público asistente al legendario coloso moscovita, el equipo kaliningradense se creció, así como Alianza Lima ante ‘Flu’, en la sexta fecha de la Copa Libertadores.

En el 40’, Báltika se fue a un demoledor contrataque que terminó en el primero de la noche, por intermedio del mediocampista brasileño Alex Fernández. La sorpresiva ventaja parcial de los pupilos del otrora histórico central de la selección de Rusia Serguey Ignashevich duró hasta comienzos de los 80, con una destacada actuación del golkiper de los provincianos Latishonok y del defensa venezolano Luna, que con su coraje y entrega ahogaba las peligrosas entradas del temible adversario. Aun así, en el 81’, el defensor brasileño Nino anotó el empate.

Los últimos minutos del alargue fueron frenéticos, mismita mecedora que se inclinaba a uno y otro equipo. Parecía que nos esperaba la tanda de penales, pero la jerarquía, -común denominador de equipos grandes como el Real Madrid y Zenit San Petersburgo- jugó su papel determinante. Fue el 95’, cuando Claudinho la sirvió de lejos, así como lo sabe hacer Yotún, al área grande. La redonda llegó a los pies de Mostovoy, quien la filtró en filigrana al área chica, donde el cabezazo de Alípov sentenció el encuentro. Zenit San Petersburgo sufrió, pero se hizo del doblete Triunfal de la temporada.