Bengoechea saltó de un pie tras victoria de Alianza Lima

Durante las últimas semanas se dijo que tenía la soga en el cuello pero Pablo Bengoechea siempre mantuvo la calma hasta que escuchó el pitazo final de Joel Alarcón y su primera reacción fue soltar un suspiro de alivio que se sintió desde Cajamarca hasta las oficinas aliancistas en La Victoria.

La situación con el estratega uruguayo era tan crítica que días previos, en una conferencia de prensa, él mismo manifestó que ya había comunicado a la dirigencia de Alianza que podían buscar un nuevo técnico para el próximo año.

Cuatro partidos sin ganar en el mes del Señor de los Milagros hacían creer que lo único que salvaba a “Bengo” era un milagro, pero apareció Mauricio Affonso para sentenciar un triunfo que se necesitaba para recuperar la confianza y volver a pensar en las semifinales.

Sin importar cuál sea el desenlace de esta historia entre Alianza y Bengoechea, el uruguayo sigue firme con el objetivo que él mismo se planteó: clasificar a las semifinales. Para ello, sabe que no hay margen de error en las siguientes seis finales que le queda pues un nuevo tropiezo podría sentenciar la suerte blanquiazul.