Incendio en Mesa Redonda: ¿Cómo inició el trágico siniestro hace 20 años?

Han pasado 20 años desde aquel sábado 29 de diciembre del 2001, cuando el incendio en Mesa Redonda marcó una de las páginas más trágicas en la historia del país, cobrándose la vida de cientos de personas.

Los miles de deudos de la tragedia demandaron al estado peruano y, aunque ganaron en los juzgados, muchos de ellos no han podido cobrar la paupérrima indemnización por la tragedia.

Como único responsable se apuntó al entonces Jefe Policial de la región Lima, Luis Alberto Sánchez Arias, pues dio la orden de retirar los anillos de seguridad, aunque los deudos solicitaron que se haga extensiva la pena a los empresarios, quienes, acusaron, empujaron a la autoridad a tomar la decisión.

Del mismo modo, la Asociación de Deudos Quemados y Huérfanos del Incendio de la Tragedia de Mesa Redonda solicitó que lo ocurrido en 2001 sea considerado como "el homicidio colectivo más grande en la historia de la justicia peruana".

Según relataron Bomberos que cubrieron la emergencia, desde las 6:40 p.m. del 29 de diciembre del 2001 llegaron a las centrales las alertas de un terrible incendio en Mesa Redonda.

Todo habría iniciado cuando un vendedor informal hizo una demostración de un artefacto pirotécnico muy cerca de una tienda llamada el Portal del Jirón Andahuaylas, cerca al cruce con el Jirón Cuzco.

La pésima manipulación, sumada al hacinamiento de material pirotécnico, las malas condiciones de seguridad en las galerías y la gran cantidad de personas produjo la trágica escalada.

En cuestión de minutos, las explosiones de material inflamable y el fuego ya se había extendido a cinco galerías, consumiendo todo cuanto tocaba. Para las 7 p.m., las llamas ya cubrían cuatro manzanas.

Fueron horas en las que uno de los centros de comercio más importantes, pero a su vez con mayor informalidad, del país ardió. Solo a las 11 p.m., y gracias a la intervención de casi todas las Compañías de Bomberos de la ciudad, se logró controlar el incendio.

El siniestro, considerado por los bomberos como Incendio de grado 6, dejó 453 fallecidos, 258 lesionados con quemaduras, 358 niños huérfanos y 83 personas no identificadas (NN), según fuentes oficiales. Además de pérdidas materiales por más de 10 millones de dólares.

"Nosotros catalogamos los incendios por códigos, este fue declarado como código 6, de grandes proporciones y fuera de control (…) Es la primera vez en la historia que se ha registrado algo así", indicó el comandante general del CGBVP, General CBP Luis Antonio Ponce La Jara a La República.