Uno apoya a Trump y otro fue el primer cardenal afroamericano: estos podrían ser los candidatos de EE. UU. a ser papa

Tras la muerte del papa Francisco, se intensifican las especulaciones sobre un posible cambio en el liderazgo de la Iglesia católica. El escenario internacional mira hacia distintas partes del mundo, pero en Estados Unidos, tres figuras ganan protagonismo como posibles papables por distintos especialistas y medios: Wilton D. Gregory, Raymond Leo Burke y Robert Francis Prevost.

Estos posibles candidatos representan diferentes rostros del catolicismo estadounidense: inclusión, tradición y gestión. Mientras Gregory encarna la diversidad y el diálogo social, Burke defiende una línea ultraconservadora cercana al trumpismo. Por su parte, Prevost, un agustino con amplia experiencia misionera y administrativa, se consolida en Roma como uno de los colaboradores más cercanos al papa Francisco.

Wilton D. Gregory, nacido en Chicago, fue el primer cardenal afroamericano y es reconocido por su liderazgo pastoral y su postura ética frente a los escándalos en la Iglesia. Fue el obispo más joven de EE. UU. en 1983 y ocupó cargos clave, como arzobispo de Atlanta y de Washington.

Destacó por su firme compromiso en la prevención del abuso sexual dentro del clero y su defensa de políticas de protección a los fieles. Crítico de la retórica de Donald Trump, pidió mayor respeto en el discurso público. Aunque es respetado por su claridad moral, sus posibilidades como papable se consideran limitadas por razones geopolíticas.

Raymond Leo Burke es un cardenal estadounidense reconocido por su firme defensa del derecho canónico y la liturgia tradicional, siendo una figura central del ala más conservadora de la Iglesia católica. Su postura crítica hacia el papa Francisco lo llevó a ser visto como un “exiliado” dentro de la jerarquía eclesiástica. Burke es una voz constante en contra de reformas impulsadas por el sumo pontífice.

Además de su influencia religiosa, Burke ha estado fuertemente vinculado a la política estadounidense, en especial al presidente Donald Trump, a quien respaldó en varias ocasiones. Esta cercanía con la derecha política y su rechazo a una Iglesia más inclusiva lo han aislado de muchos sectores del catolicismo global. Aunque conserva apoyo en sectores tradicionalistas, su perfil como papable es visto con escepticismo fuera de esos círculos.

Robert Francis Prevost, nacido en Chicago, es prefecto del Dicasterio para los Obispos desde 2023, uno de los cargos más influyentes del Vaticano. Su papel dentro de la jerarquía eclesiástica y su cercanía al papa Francisco lo hace una figura sólida para convertirse en el próximo sumo pontífice.

Sin embargo, el Agustino estuvo en el ojo de la tormenta cuando fue Obispo de Chiclayo en Perú. Fue señalado por presuntamente haber encubierto a sacerdotes acusados de abusos sexuales durante su labor en la diócesis de Chiclayo, en Perú. Sin embargo, la diócesis rechazó de manera tajante todas estas acusaciones.