Jorge Jesús, director técnico del Flamengo, regresó a su natal Portugal para reunirse con su familia, pero en el aeropuerto vivió un momento incómodo con unos periodistas que buscaban unas declaraciones suyas sobre su salud y el coronavirus.
El estratega recibió un permiso especial del club donde trabaja para reunirse con su familia en Lisboa y allí pasar la cuarentena. En un principio dio positivo en un test de covid-19, pero en la contraprueba se determinó que el entrenador no estaba contagiado ni era portador de la enfermedad.
“Dejenme ir. No respetan a las personas. Se pueden contagiar del coronavirus”, dijo el entrenador de 65 años en el aeropuerto de Lisboa ante la presencia de camarógrafos y periodistas que intentaban robarle unas palabras.
El entrenador esperará a que el orden deportivo se restablezca para volver a Rio de Janeiro y continuar con la preparación del equipo de Flamengo que estaba disputando el Campeonato Carioca y la Copa Libertadores antes que se suspendiera todo.
La liga brasileña está suspendida de manera indefinida, como el resto de torneos en el resto del mundo por el coronavirus.