Organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes solicitaron al presidente Joe Biden la desactivación de una red de más de 200 centros de detención.
Únete a nuestro canal de WhatsAppEn Estados Unidos, existen más de 200 centros de detención, que abarcan desde cárceles locales hasta prisiones privadas, destinados a la retención de inmigrantes. Hasta principios de este mes, aproximadamente 39.000 personas se encontraban en estas instalaciones.
Ante ello, 200 organizaciones que defienden los derechos de los migrantes han instado al presidente Biden, a través de una carta divulgada esta semana, a iniciar el desmantelamiento de estos centros antes de que Donald Trump asuma nuevamente el poder y ponga en marcha su política migratoria, la cual calificó como la “mayor deportación de la historia”. AQUÍ más información.
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Recientemente, un grupo de 193 organizaciones ha enviado una carta a Joe Biden y a Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, instando a la administración a tomar acciones urgentes para prevenir una crisis humanitaria que afectaría a millones de personas, tal como informó 'El País'.
En la misiva, los firmantes advierten sobre el riesgo de entregar un sistema de detención y deportación que consideran inhumano al próximo presidente. En particular, solicitan que el Gobierno demócrata limite la capacidad de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), que ha intentado expandir significativamente su red de centros de detención en el último año, según las denuncias presentadas.
Las organizaciones que abogan por los derechos de los inmigrantes han solicitado el cierre inmediato de los centros de detención en funcionamiento y la paralización de cualquier esfuerzo para abrir nuevas instalaciones. En este sentido, piden que se congelen los contratos en negociación con empresas penitenciarias privadas y otras entidades que buscan expandir la red de centros de detención.
Además, exigen la implementación de medidas que limiten la capacidad del Gobierno de Trump para establecer nuevas cárceles a partir de su toma de posesión en enero. La coalición nacional Detention Watch Network, que lidera esta iniciativa, advierte que proporcionar un sistema de detención ampliado a la nueva administración tendría consecuencias devastadoras para la comunidad inmigrante.
Tanto Donald Trump como los integrantes de su próximo Gobierno, responsables de implementar sus políticas migratorias, han señalado que los centros de detención jugarán un papel fundamental en la ejecución de la deportación masiva de millones de personas, una promesa que han reiterado. Más allá de la red de instalaciones ya existente, se contempla su expansión para albergar a un mayor número de inmigrantes.
Durante su primer mandato, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) inauguró más de 40 nuevos centros de detención. En esta nueva etapa, Tom Homan, quien lideró la agencia federal en el pasado, regresa como “zar de la frontera” con la intención de continuar y ampliar este sistema.