Se alerta a comunidades migrantes ilegales sobre el posible regreso de agentes del ICE a un sitio frecuentado, generando temor e incertidumbre en la zona.
La posible presencia de agentes del ICE en Rikers Island vuelve a generar preocupación entre comunidades inmigrantes indocumentadas en Nueva York. Una audiencia judicial decidirá si esta temida agencia podrá operar nuevamente en uno de los centros de detención más grandes del país.
Aunque el alcalde Eric Adams intentó facilitar el regreso de ICE a Rikers con una orden ejecutiva, una jueza del estado frenó la medida. Organizaciones de derechos civiles advierten que esto pondría en riesgo a personas sin antecedentes graves, solo acusadas de infracciones leves. La decisión final será tomada en la Corte Suprema Estatal del Bajo Manhattan en los próximos días.
La prisión de Rikers Island, ubicada en la ciudad de Nueva York, funciona como complejo penitenciario y es considerado como uno de los centros de detención más grandes de Estados Unidos. Durante la gestión de Trump, fue utilizado para albergar a inmigrantes detenidos por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Sin embargo, actualmente una audiencia judicial definirá si los agentes del ICE podrán volver a operar en dicha cárcel.
La decisión se tomará en la Corte Suprema Estatal ubicada en el Bajo Manhattan, donde también se evaluará el posible regreso de otras agencias federales al centro penitenciario. Asimismo, es importante mencionar que, en febrero de este año, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, dio a conocer que firmaría una orden ejecutiva para permitir la presencia de agentes del ICE en la cárcel de Rikers Island con la finalidad de identificar y deportar a inmigrantes que sean criminales y con serios antecedentes penales.
Sin embargo, esta medida fue bloqueada por una jueza del estado, debido a que no se quiere poner en riesgo a otros inmigrantes detenidos allí por delitos leves o infracciones, o que no pueden pagar la fianza, etc.
ICE tiene como objetivo proteger a Estados Unidos, aplicando leyes migratorias y realizando investigaciones criminales para garantizar la seguridad nacional. Asimismo, cuenta con dos ramas principales: ERO, enfocada en arrestar y deportar a personas que violan leyes migratorias, y HSI, que combate el crimen organizado y el terrorismo.