Una amenaza de bomba ocasionó que un Walmart en Richmond evacue con el personal y clientes. ¿Qué pasó con los clientes?
El pasado sábado 19 de julio, una persona alertó a la policía sobre la aparente presencia de una bomba en el Walmart de 3.601 E. Main St. en Richmond, Indiana. Por seguridad, las autoridades optaron por evacuar la tienda en Estados Unidos para proteger la integridad de los clientes y empleados que circulaban alrededor.
En un comunicado en Facebook, la policía decidió informar que los oficiales revisaron el Walmart y permitieron que los clientes regresaran, ya que la amenaza parecía falsa. Aunque la situación sigue siendo monitoreada, no se ha confirmado ninguna amenaza real.
El departamento de policía de Richmond señaló que la alarma sigue un indicio de llamadas fraudulentas por el mismo individuo, lo que ha generado alteraciones significativas y despliegues policiales innecesarios.
Según WTHR 13NEWS, en la falsa llamada de emergencia, el sospechoso supuestamente exigió una disculpa del jefe de policía, Kyle Weatherly, por lo que consideraba comentarios negativos hacia él.
El jefe Weatherly respondió a la amenaza de manera contundente, afirmando: "No me disculparé, pero con gusto le ofrecería unas esposas y espero ser yo quien se las ponga". Esta declaración refleja la seriedad con la que las autoridades están tratando el asunto y su compromiso de llevar ante la justicia al responsable de estas amenazas.
La policía de Richmond indicó que trabaja en estrecha colaboración con socios estatales y federales para identificar y localizar al autor de las llamadas. "Las acciones de este individuo han puesto en riesgo repetidamente al público, a los servicios de emergencia y a los negocios, y se tratarán con la seriedad que merecen", enfatizó el departamento de policía.
Las autoridades instaron al público a evitar la zona mientras la investigación sigue en curso. Se espera que la policía proporcione actualizaciones conforme se disponga de más información sobre el caso. La comunidad se mantiene alerta ante la posibilidad de nuevas amenazas y la necesidad de garantizar la seguridad en espacios públicos.