El coronavirus sigue siendo un problema latente en Europa y el fútbol sigue siendo afectado. Recientemente, la Selección de Francia reveló que el delantero Kylian Mbappé fue diagnosticado como un caso positivo, razón por la cual tendrá que permanecer aislado hasta recuperarse y no ser un peligro para los demás.
La juventud y buen estado de salud hacen que la recuperación del futbolista no pueda tener muchas complicaciones, aunque es claro que permanecerá fuera de las canchas por un tiempo. Esta ausencia perjudicará principalmente al PSG, club al que pertenece Mbappé y que iniciará actividad a partir de esta semana.
Desde la interna del club parisino no ocultaron su molestia por el caso y han mostrado su crítica a la Federación Francesa de Fútbol (FFF). “Es inaceptable saber por los medios que hay un jugador infectados. ¿Qué hacemos ahora? Nadie del seleccionado nos contactó con el PSG”, indicó Leonardo, director deportivo.
“Eso es una falta de respeto”, añadió el directivo, notoriamente enojado. El dolor de cabeza por la ausencia no será el único, dado que las vacaciones de los jugadores del PSG han terminado con un costo caro: ya son siete deportistas del plantel principal que han sido diagnosticados con COVID-19.
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Antes se había conocido que Neymar, Mauro Icardi, Ángel Di María, Leandro Paredes, Marquinhos y Keylor Navas también fueron contagiados. Todos ellos van a pasar por aislamiento obligatorio y, al menos, se van a perder las dos próximas fechas de arranque de la Ligue 1 de Francia, que ya inició.
El PSG iniciará su participación en la Ligue 1 de Francia este jueves 10 de septiembre, cuando visiten al Lens, reprogramado por la fecha 2. Luego, el domingo 13 medirá fuerzas con el Olympique Lyon y el 16 ante Metz, este último pospuesto de la fecha 1. El calendario es apretado y tener a sus estrellas complicado.