Para alzar trofeos, conseguir objetivos y dejar una buena impresión ante la hinchada es vital que los errores por la toma de decisiones o por falencias técnicas se mantengan en los entrenamientos y no se trasladen a los partidos oficiales, en los que los puntos están sobre la mesa.
Russo, en toda su experiencia como estratega, aprendió que es importante corregir antes de ejecutar y, bajo el intenso calor de la cancha de Lurín, pone mano dura cuando uno de sus pupilos se equivoca pues detiene todo, se acerca, llama la atención y aconseja para que ello no se repita. Tal como sucedió ayer con Wilder Cartagena. Paso a paso le habló sin tapujos, como padre al hijo.
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Sin embargo, es consciente que equivocarse es algo normal en el fútbol y lo importante es hacerlo en la menor cantidad posible. “Es seguro que hayan errores pero hay que subsanarlos jugando. Cuando nos equivocamos, mejoramos y buscamos corregir”, sostuvo ayer el argentino.
Y en esa convivencia de pretemporada, en la que se ha mejorado mucho con relación al día 1, Russo tiene todo definido para jugar ante el Boys. Su sistema favorito, el 4-3-3, será conformado por Pedro Gallese; Aldair Salazar, Hansell Riojas, Aldair Fuentes, Anhony Rosell, Wilder Cartagena, Tomás Costa, Luis Ramírez, Kevin Quevedo, José Manzaneda y Mauricio Affonso.•