Feliz por regresar a la acción. Así se siente Cindy Novoa al saber que este jueves vuelven los entrenamientos presenciales para el equipo femenino de Alianza Lima luego de más de un año de inactividad competitiva debido a la pandemia. La delantera confesó que no fue fácil dejar Universitario para ahora defender los colores blanquiazules.
También se refirió a la Copa Libertadores Femenina 2020, en la cual no pudo participar tras desligarse del elenco crema. Ahora lleva consigo una espina que busca sacársela este año.
La jugadora de 25 años natural de Amazonas alista sus botines para el regreso de los trabajos en campo. "He esperado tanto tiempo que me siento un poco nerviosa". Indica que si bien estuvo entrenando con la selección peruana, "volver a competir es una sensación única diferente a entrenar por zoom o desde casa".
Para el inicio del torneo femenino ya hay fecha: el 29 de mayo rueda el balón en la competencia descentralizada.
¿Cómo fue tu recibimiento en Alianza Lima?
Los hinchas y las personas ligadas a Alianza me recibieron de la mejor manera. Estoy tranquila, cómoda, esperando que volvamos a competir.
Estoy segura que el hincha espera mucho de mí, entonces me estoy preparando para estar a la altura de una institución grande, sobre todo a la altura de lo que yo quiero, busco mejorar siempre y aportar en el equipo que estoy. Ahora, en Alianza y me gusta su proyecto, vamos a ir con todo este año.
¿Fue fácil recibir esta propuesta de Alianza después de tu pasado en Universitario? ¿Te costó?
Cambiarme de equipo no fue fácil. Tenía una competición por la que había luchado bastante en el 2019 que era la Copa Libertadores Femenina. Uno siempre sueña competir afuera y ganar, competir con todos los clubes de Sudamérica, esa era mi ilusión, pero viendo las cosas como se dio tuve que dejar Universitario.
Llego a Alianza por el proyecto que me ofrece, nunca fue primordial el dinero, fue el trato de cómo iba a ser el proyecto. Mucha gente se ha preguntado si yo gano más en Alianza que en la ‘U’, eso no es cierto, yo percibo menos de lo que ganaba en la Universitario. Estoy tranquila, cómoda por el simple hecho que busco que el fútbol femenino sea respetado, que las jugadoras estén cómodas, que no se estén preocupando por otras cosas y eso es lo que Alianza me da.
¿Cómo te sentiste al ver la participación de Universitario en la Libertadores Femenina?
Con 15 días de entrenamiento fueron a competir. Se tenían que presentar si o sí porque es parte de tener la responsabilidad tras haber ganado un campeonato. Me sentí parte de ese equipo porque estaban compitiendo en algo por lo que nosotras habíamos luchado mucho. Pero en el fútbol te da revanchas (participar en un torneo internacional), si no se me da este año de repente el siguiente, me estoy preparando para eso.
En el largo tiempo de inactividad competitiva debido a la pandemia, ¿qué sentiste al ver que se le dio prioridad al fútbol profesional masculino?
Eso es parte del día a día lo que vivimos las futbolistas, sé que hay más prioridad y se entiende. Es parte del marketing, muchas personas están trabajando dentro del fútbol.
Yo lo tomé de la mejor manera porque estábamos en una pandemia mundial y que era difícil para nosotras volver porque todas las chicas no cuentas con recursos, por ejemplo: trasladarte en carros particulares a los entrenamientos para evitar esos contactos en el transporte público. Entonces era más viable que los chicos regresen que nosotras.
Ahora que han ido mejorando las cosas, ya vamos a volver este jueves de forma presencial. Claro que en algún momento nos hubiera gustado que nos tomen un poco más de importancia, que se vea todo el esfuerzo posible, que están intentando para que regrese el fútbol femenino, pero no pasó y no me sorprende.
¿Cómo te sientes al ser reconocida como uno de los rostros de fútbol femenino en la actualidad?
Muchos años trabajé en el fútbol, claro que no hubo visibilización, quizá hubiera sido más conocida años atrás. Hay gente que me escribe, le gusta lo que hago y transmito. Eso es bueno, porque ayuda a inspirar a niños que quieren iniciarse en este deporte.
Particularmente sí respondo cuando me escriben, no es que vaya a dejar ese lado humilde. Lo tomo con responsabilidad, tranquilidad y hago lo que más me gusta, por eso respeto mucho el fútbol.
¿En tu familia cómo tomaron tu fichaje por Alianza Lima?
Tengo familiares que son de Alianza y están más que felices. La mayoría de mi familia no es de la ‘U’, yo era la única que jugaba en Universitario. Mi madre y hermanos siempre estarán contentos en donde me encuentre.
Yo vestí la camiseta (blanquiazul) hace muchos años, fue mi primera academia a donde me llevaron a jugar a fútbol con niños. Fue una experiencia muy bonita. Ahora que estoy en Alianza, recordaba algunas cosas como las veces que era la única niña al lado de varios chicos, esa sensación de nerviosismo, qué pensarán de mi o qué dirán. Felizmente los chicos siempre fueron empáticos y me consideraron parte de ellos, en Alianza aprendí eso.
¿Para qué está Alianza Lima en esta temporada?
Ganar esta competencia. Vamos a intentar hasta el último el campeonar.
¿Esta larga paralización le pasará factura en lo físico?
Sí, pero las chicas han venido manteniéndose. Después de un año, competir va a ser un poco complicado al principio. Luego agarraremos ritmo y continuidad, eso va a mejorar.
En el tiempo que no estabas segura si ibas a continuar en Universitario y antes que llegue la propuesta de Alianza, ¿existieron otras propuestas del medio local o de afuera?
Sí, internacionales y locales. Estuvieron Sporting Cristal y César Vallejo, también existió una comunicación con el Racing Club (Argentina) y un club de la Cuarta División de España. Lo que me movió a aceptar la oferta de Alianza fue el proyecto que me pusieron delante mío.
¿Cómo ayudaste a tu familia en esta pandemia en lo económico?
Claro, nosotras no vivimos del fútbol. Podemos decir que es 50/50 (fútbol y trabajo). Nos gustaría decir un día ‘quiero vivir del fútbol’, ahora no se puede, de repente más adelante se dé. Nosotras estudiamos, trabajamos y hacemos muchas cosas más de lo que es el fútbol. Hay muchas cosas que nos gustaría que cambien.
¿Si no hubieses sido futbolista, en qué te habrías desarrollado?
Trabajar en mi propia carrera; Administración de Negocios Internacionales o en el negocio de mi familia.
Si tuvieras un cargo dentro de la FPF, ¿qué harías por el fútbol femenino?
Con lo que veo, mejorar la estructura del campeonato. Armar una propia base, solo femenino, no un copia y pega de la Copa Perú. Hacer competencias de sub-15, sub-17, sub-18, ayudar a los equipos a que tengan un buen comando técnico, por lo menos lo esencial, un entrenador, preparador físico, medio y un preparador de arquero. Muchas veces que un entrenador hacía de todo.