Quién mejor que Alfredo González para condimentar una final que requiere sabor. El rol culinario que ahora ejerce el “Gordo” le permite ponerle pimienta a una definición que necesita de polémica. Ese aderezo con el toque único del desenfadado ex presidente crema, que le brinda a los cremas la fórmula para alzar el título.
José Torres Orellana
¿Qué haría Alfredo González para darle sabor a esta final?Estos partidos hay que calentarlos con todo. Cuando definimos un título contra Cristal (1998) le hice recordar a Oblitas unas cosas de su vida privada. Ahora habrá que sacarle algo escondido a los de Garcilaso para que se desconcentren.
¿A quién te le prenderías?Habrá que sacarle algún trapito sucio a “Petróleo”, como estuvo tanto tiempo en la Copa Perú, ahí se cuecen muchas habas, algún problemita oculto tendrá por ahí. También hay que recordar que este Real Garcilaso no es Deportivo Garcilaso, el tradicional del Cusco. Este es un equipo con plata pero que no tiene tradición ni hinchas.
¿La “U” es un justo finalista?Sí, pero hay que ser sinceros, esta final se la debemos a los grandes errores de Cristal este año. Primero con un técnico soberbio como Mosquera, luego Vivas que es DT de menores, y ahora trae a Ahmed que es igual. Alianza no tuvo plantel y no fue rival.
¿Es solo mérito de Comizzo?Él empezó mal, irregular, pero luego hizo bien las cosas, y en el último partido embarró todo al poner suplentes ante Gálvez en Chimbote. Pensó que Garcilaso escogería primero ser visita y los cusqueños fueron vivos al escoger Espinar primero. Perder el primer lugar del acumulado complicó todo, y fue culpa de Rocío Chávez, que debió hacer que jueguen los titulares.
¿Habrías dejado que lleven a tu equipo a Espinar?No lo permitía. Nos fue mal allá y ahora se complica todo porque hay que forzar un tercer partido que será en Huancayo, otra vez altura, esas son las consecuencias de no acabar primeros, ahora tenemos la presión encima.
¿Tú le armabas el equipo a los técnicos?No, pero me hacía respetar porque el que manda en un club es el presidente. Una vez en una final, Piazza no quería poner a Grondona y prefería a Cantoro, pero le exigí que juegue Grondona.
¿Si en Matute sacaste un papel higiénico, qué habrías hecho en Espinar?Eso de Matute fue porque el presidente de Alianza (Alberto Masías) no me dejaba bajar a darle el pésame a (Juan) Pajuelo, que había fallecido su esposa, y por eso me piqué. En Espinar no me habría dejado pisar el poncho, si ya habíamos empatado, no podíamos perder
¿Cómo se consigue el título?Yo tengo la receta, hay que ser inteligentes y jugar con garra, solo así campeonamos.