El pasado 30 de enero se hizo pública la noticia del futuro enlace entre Rafa Nadal y Xisca Perelló, una noticia que se reflejó en numerosos medios de comunicación de todo el mundo.
El tenista de Manacor quiere investigar la filtración de la noticia de su boda. Explican que son muy pocas las personas de su entorno que sabían sus planes de boda para el otoño. Aseguran que la información salió a la luz sin su consentimiento, lo que ha preocupado al deportista por la falta de confidencialidad de su entorno más cercano.
La pareja se comprometió en mayo del año pasado en Roma pero, desde entonces, han guardado el secreto. Y es que hasta el momento todo son especulaciones y no se sabe nada en concreto sobre los detalles de su boda.
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Después de la filtración, Nadal ha estrechado aún más su círculo de confianza y trata de conocer quién fue quien le traicionó. El rotativo asegura que el tenista está reduciendo cada vez más el número de personas a las que cuenta las cosas. Sobre todo porque está labrándose un futuro en el mundo de los negocios y maneja una información sensible que no quiere que acabe en la prensa.