Su carrera, que entró en declive en 2009, año en que salieron a la luz sus infidelidades y su adicción al sexo, continúa en caída libre. El golfista estadounidense Tiger Woods descendió hasta el puesto 28 del escalafón mundial, con apenas 3,495 puntos en su haber, y se mantiene muy lejos del líder, el inglés Luke Donald (9,492 unidades).
El “Tigre” dominó el golf durante 623 semanas, pero su realidad es dolorosa. Por lo pronto, se alista para participar a partir de este jueves en el torneo Bridgestone, en Ohio, luego de permanecer cerca de tres meses inactivo por lesiones en sus rodillas y en el talón de Aquiles del pie izquierdo.
También competirá en el Abierto de Australia que se celebrará del 10 al 13 de noviembre. Además podría participar en la Copa Presidentes si es que el capitán Fred Couples lo elige como miembro del equipo.
“Estoy muy contento por poder participar en el Open de Australia”, dijo Woods. “No participo en esta competición desde 1996 y estoy deseando regresar”, agregó el golfista, que no juega desde el 12 de mayo.
Tiger Woods, de 35 años de edad, cuenta con catorce victorias en citas del Grand Slam, pero espera que se acabe la tormenta y gane un título tras hace 20 meses de amarga sequía.