Atención familias inmigrantes, la reciente normativa en Estados Unidos ha generado un debate sobre la ciudadanía de los recién nacidos.
Únete a nuestro canal de WhatsAppPara numerosas familias inmigrantes, el nacimiento de un hijo en Estados Unidos simboliza una valiosa oportunidad para cambiar su futuro. De acuerdo con la Constitución estadounidense, todos los bebés que nacen en el país obtienen automáticamente la ciudadanía, sin importar la situación migratoria de sus progenitores. Este principio, denominado "jus soli" o derecho de suelo, constituye un pilar esencial del marco legal en la nación. AQUÍ más información al respecto.
A pesar de que este privilegio no asegura beneficios inmediatos para los padres, las ventajas que brinda al recién nacido son significativas. Entre ellas se encuentran la protección bajo la legislación estadounidense, el acceso a servicios públicos y la posibilidad de forjar un futuro con mejores oportunidades en educación y empleo. Comprender estos derechos es fundamental para las familias que están considerando sus alternativas migratorias.
A CONTINUACIÓN, los tres derechos que puede recibir un bebé al nacer en EE.UU.
El nacimiento de un hijo en Estados Unidos representa un momento significativo para las familias inmigrantes, aunque no garantiza automáticamente beneficios migratorios para los padres. La ciudadanía del niño no se extiende a los progenitores de manera directa. Sin embargo, existen vías legales que podrían facilitar oportunidades en el futuro.
Cuando el niño cumpla 21 años, tendrá la posibilidad de solicitar la residencia permanente para sus padres, lo que podría ser un paso hacia la regularización de su estatus migratorio. Es importante destacar que este proceso implica cumplir con ciertos requisitos, y los padres deben evitar estar en situación irregular durante ese período para prevenir complicaciones en su situación migratoria.