Durante sus mensajes políticos, Donald Trump expresó su intención de ponerle fin a la guerra de Ucrania y Rusia, deseando entablar acuerdos con los presidentes.
Únete a nuestro canal de WhatsAppEl paradigma resulta positivo para Donald Trump. Finalmente, después de haber hecho pública su intención de finalizar la guerra de Ucrania y Rusia una vez retome la presidencia de Estados Unidos, los representantes de los respectivos países parecen estar a punto de entablar acuerdos sin condiciones. ¿Será el contexto idóneo que necesitaba el futuro mandatario de la Casa Blanca? ¿Sus esfuerzos de mantener un diálogo civilizado habrán dado frutos? Todos los detalles en esta nota.
Todo indica a que podría ser posible. Después de todo, el 10 de enero, el Kremlin aseguró que Rusia está de acuerdo en entablar una reunión entre el líder ruso, Vladimir Putin, y el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, con el fin de hablar sobre la probabilidad de solucionar el conflicto con Ucrania de manera pacífica.
"No se necesita condiciones. Se requiere el deseo mutuo y la voluntad política de entablar un diálogo y solucionar los actuales problemas a través del diálogo", expresó Dmitri Peskov, portavoz presidencial, en una reciente rueda de prensa telefónica. Siendo así, aseguró que Putin está listo para abordar el inconveniente en una mesa de negociaciones.
Es a raíz de este comunicado que el equipo del presidente electo del país norteamericano está preparando una reunión con Putin. "Él quiere que nos reunamos, así que lo estamos preparando. Tenemos que poner fin a esa guerra. Es un lío sangriento, se están matando soldados", aseguró el líder republicano.
Cabe destacar que, en paralelo, el líder ucraniano, Volodymyr Zelensky, se ha mostrado dispuesto a realizar negociaciones con Donald Trump con base en la seguridad para su país, por lo que se reuniría con Putin para frenar la guerra que, en febrero, cumpliría tres años desde que inició.
La guerra entre Rusia y Ucrania comenzó el 24 de febrero de 2022, cuando Rusia lanzó una invasión militar a gran escala. Los ataques causaron víctimas civiles y daños en hospitales, escuelas, viviendas y otros edificios. En la primera semana, más de un millón de ucranianos huyeron de sus hogares buscando refugio en otros países.
En Rusia, el gobierno bloqueó medios independientes por su cobertura de la guerra, lo que llevó al cierre de varios de ellos, y detuvo a manifestantes que protestaban contra el conflicto. Además de las pérdidas humanas, la guerra generó consecuencias económicas, agravando problemas como el desabastecimiento y el aumento en los precios del combustible y el transporte, que ya venían afectando a la población tras la pandemia.