El exsecretario de Seguridad Pública del gobierno mexicano será trasladado a una prisión de máxima seguridad en el estado de Colorado, Estados Unidos.
ADX Florence es una prisión de máxima seguridad ubicada en Colorado. Conocida también como el "Alcatraz de las Montañas Rocosas", alberga a algunos de los criminales más peligrosos del sistema penitenciario de Estados Unidos. Uno de sus reclusos es Joaquín "El Chapo" Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa, quien tendrá como compañero a otro mexicano: el exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna.
Genaro García Luna formó parte del gobierno de Felipe Calderón, que se desempeñó entre 2006 y 2012. Fue secretario de Seguridad Pública durante ese periodo. En 2024, fue declarado culpable de conspiración para el tráfico de drogas, delincuencia organizada y falsedad de declaraciones. Ese mismo año, fue sentenciado a 38 años y 4 meses de prisión, condena que inicialmente cumplía en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, Nueva York.
Posteriormente, fue trasladado a la prisión USP Lee, ubicada en Virginia, y finalmente recluido en ADX Florence, en Colorado. Esta prisión está reservada para reos considerados de máxima peligrosidad o que representan un riesgo institucional. El centro cuenta con 490 celdas individuales, y los internos permanecen en espacios de 2 por 3 metros durante 23 horas al día. Actualmente, alberga a 367 detenidos.
Uno de los detenidos en esta prisión es el narcotraficante y exlíder del Cártel de Sinaloa, "El Chapo" Guzmán, recluido desde 2019 y condenado a cadena perpetua. Hasta la fecha, ningún reo ha logrado escapar, ya que las celdas cuentan con una única ventana de 106 centímetros de alto por 10 centímetros de ancho. Además, el recinto está equipado con cables de acero que impiden el aterrizaje de helicópteros en el patio.
Ariel Moutsatsos, analista internacional, explicó a un medio local tres posibles causas por las cuales García Luna fue enviado a esta prisión. La primera sugiere que este destino sería definitivo para el cumplimiento de su condena de 98 años, debido a su comportamiento durante el juicio y su intento de manipular a otros reclusos para que declararan a su favor. La segunda causa estaría relacionada con nuevas investigaciones que Estados Unidos estaría llevando a cabo para identificar a más responsables, tanto en el ámbito político como financiero, vinculados al narcotráfico.
Una última posibilidad planteada por Ariel sugiere que este traslado del exfuncionario mexicano podría ser una estrategia para que García Luna acepte negociar y colaborar con las autoridades. El analista explicó: "Puede ser que se pusieron un poco más duros con él para ver si acepta negociar y luego lo regresan a condiciones mejores"; es decir, se trataría de una medida temporal y podría ser trasladado nuevamente a otro centro penitenciario.