Las autoridades de Nueva York, se encuentran en la búsqueda de quienes infrinjan una normativa crucial en la celebración del Día de la Independencia.
Las autoridades de Nueva York han lanzado recientemente una advertencia a la ciudadanía respecto a las normativas que estuvieron vigentes el último 4 de julio, fecha en la que se celebró el Día de la Independencia de Estados Unidos. El gobierno estatal estableció, para esta fecha, recompensas de US$1.000 para quienes proporcionen información sobre individuos que incumplan estas regulaciones.
Esta sorpresiva medida busca garantizar el cumplimiento de las leyes y evitar que los infractores enfrenten acciones por parte de las autoridades competentes. ¿Qué estuvo prohibido en este feriado? Conoce aquí la restricción y quiénes son los infractores buscados por el estado.
'El Tiempo' y otros medios informaron que, el gobierno de Nueva York, decidió emitir un comunicado oficial en el que se ofrece una recompensa de US$1.000 a quienes proporcionen información que conduzca a la identificación de individuos que hayan poseído o distribuido fuegos artificiales durante las celebraciones del viernes 4 de julio.
Vale resaltar que esta actividad es considerada ilegal en la ciudad, es así que las autoridades han advertido sobre los peligros asociados, señalando que el uso de fuegos artificiales puede resultar en lesiones graves y que quienes sean sorprendidos con estos artefactos podrían enfrentar arrestos, confiscación de vehículos o el cierre de negocios.
Es importante señalar que, los ciudadanos preocupados por esta situación, pueden realizar denuncias de manera anónima sobre la entrega, venta o almacenamiento de fuegos artificiales, llamando al 911 para reportar crímenes en curso o al 311 para brindar información relevante.
"El Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York te insta a celebrar de forma segura el 4 de julio", se lee en el mensaje oficial de las autoridades de Nueva York.
De acuerdo con el Código Penal de Nueva York, se considera como "tráfico ilegal de fuegos artificiales" a quienes posean, exploten, vendan o distribuyan pirotecnia en la ciudad, incluyendo aquellos que transporten fuegos artificiales adquiridos en estados donde su uso es legal, como Pensilvania.