Frotó la lámpara en el segundo tiempo y despertó Brasil. Neymar se puso el equipo al hombro y fue protagonista en el agónico gol de Miranda, llevándose la copa donada por los reyes de Arabia Saudita.El punta del PSG demostró su liderazgo en momentos complicados y, pese a la rudeza de los argentinos, se las ingenió para provocar peligro.
En la última jugada del partido, un venenoso centro de Ney encontró el remate de Miranda, que sentenció a un Argentina que no encuentra el rumbo.Neymar, tras Rusia 2018, estuvo en los 4 partidos, anotó 2 goles y metió 3 asistencias. Eso sí, ayer se quedó en 59 goles con la selección brasileña mayor.