Le puede costar caro. Gareth Bale provocó a la hinchada del Atlético de Madrid en el derbi del último fin de semana y las autoridades de la Liga Española han decidido abrirle un expediente disciplinario al jugador del Real Madrid.
En su escrito, La Liga denuncia que:
"En el minuto 73 de partido, y tras anotar el jugador del Real Madrid CF, Gareth Bale, dorsal 11, el tercer gol de su equipo, en la celebración de este, siendo audible en la grabación audiovisual del partido algunos abucheos de parte de los aficionados locales, agita el brazo derecho llevándoselo a la proximidad de su cabeza, en previsible signo de provocación animosa al público, efectuando posteriormente un ademán de posible significado obsceno y despectivo levantando el brazo doblado y golpeándose en la mitad de él con la otra mano".
Finalmente, La Liga recuerda que el Comité de Disciplina de la RFEF puede sancionar al infractor con suspensión de cuatro a doce partidos; si no se obtiene la animosidad del público, la suspensión será de uno a tres partidos o por tiempo de hasta un mes.
Esto siempre que el Comité considere que la celebración denunciada supone una provocación al público. Ahora se tendrá que ver si el Comité de Competición acepta la denuncia de La Liga y qué sanción le puede caer a Gareth Bale.