Ganar en Anfield Road se ha convertido para cualquier equipo en una misión imposible, puesto que Liverpool se hace casi invencible cuando tiene el apoyo de los suyos.
Los “Reds”, con la ajustada victoria de ayer (2-1) sobre el Tottenham, llegaron a los 45 juegos en casa sin conocer la derrota en la Premier League. Registran 35 triunfos y 10 empates, marcando 117 goles y recibiendo solamente 25. Números que asustan.
Un zurdazo de Jordan Henderson (52’) y un penal Mohamed Salah (75’), que al final se retiró un poco sentido del estadio, bastaron para revertir el gol marcado al minuto de juego por el inglés Harry Kane.
Con esta nueva alegría, Liverpool se mantiene en lo más alto de la Premier League y con una ventaja de seis unidades sobre su más cercano y peligroso perseguidor, el Manchester City. De momento, los pupilos de Jurgen Klopp siguen a paso firme.
La próxima jornada de la Premier League, Liverpool visitará al Aston Villa en el estadio Villa Park.