Oliver Kahn, miembro del Consejo Directivo del Bayern Múnich, bajó a la cancha y no precisamente para vestirse de corto, sino para calmar a los Ultras bávaros quienes arremetieron contra el dueño del Hoffenheim, Dietmar Hopp.
Kahn mostró una faceta nunca antes vista en los terrenos de juego. Y no es para menos. Hinchas del Bayern interrumpieron un juego por protesta hacia un socio mayoritario del conjunto rival. Se salió de sus casillas.
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Transcurrían los 77' del complemento, Bayern Múnich goleaba 6-0 a Hoffenheim en el primer duelo de la fecha 24 de la Bundesliga. Todo estaba normal hasta que los Ultras del conjunto 'bávaro' mostraron pancartas de insulto a Dietmar Hopp.
Ante ello, Oliver Kahn y Karl-Heinz Rummenigge, presidente del directorio del Bayern, bajaron de sus respectivos palcos donde estaban ubicados para calmar a los hinchas. Al primero mencionado se le notó más enérgico por la actitud que tuvieron.
Resulta que los seguidores de clubes tradicionales como el Munich, Dortmund, Monchengladbach, entre otros, no quieren que más empresas tengan que ver con el manejo del fútbol alemán. Un ejemplo claro es el caso del Redl Bull Salzburgo, equipo que tras ser adquirido por la conocida empresa de energizantes se encuentra luchando por cosas importantes en Europa.