Londres, Inglaterra
Chelsea revivió sus jornadas de grandeza e hizo su respetar la localía en un encuentro que empezó perdiendo ante el Basilea de Suiza. Los “blues” terminaron imponiéndose por 3-1 y clasificaron a la final de la Europa League.
El equipo visitante, que había caído por 2-1 jugando en casa, salió decidido a remontar la serie y sorprendió a todos los asistentes en Stamford Bridge abriendo el marcador con un gol de Mohamed Salah a los 45’.
Los locales habían iniciado el partido con un exceso de confianza y decidieron liquidar la serie en el inicio de la segunda mitad, lográndolo en apenas diez minutos.
El empate llegó a los 50’ por intermedio del español Fernando Torres, quien definió bien ante la salida del portero Yann Sommer, marcando su cuarto gol en la competición.
Apenas dos minutos después apareció el nigeriano Víctor Moses para aprovechar un mal rechazo de la defensa y adelantar al Chelsea.
El brasileño David Luiz selló la cuenta a los 59’ con un verdadero golazo de larga distancia que se clavó en el ángulo derecho de Sommer. Así acabaron las esperanzas del Basilea, la gran sorpresa del torneo.
El Chelsea enfrentará el próximo 15 de mayo al Benfica con la intención de sumarse a Juventus, Ajax y Bayern Múnich, como los únicos equipos que han conseguido ganar la Champions, la Recopa de Europa y la Europa League, la triple corona del fútbol europeo.
