Cargando...

El árbol más VENENOSO del planeta está en Sudamérica: Es tan PELIGROSO que una rozadura podría ser MORTAL

Este 'Árbol de la muerte' tiene una apariencia muy inofensiva, pero cuenta con una sustancia que es letal para el humano. ¿Dónde se encuentra?

Únete a nuestro canal de WhatsApp
El árbol más venenoso del planeta se encuentra en Sudamérica.

La naturaleza continúa asombrándonos con su diversidad de flora y fauna en todo el mundo. En esta ocasión, queremos destacar la existencia de un árbol venenoso cuya apariencia puede ser engaños; sin embargo resulta mortal para cualquier persona que se cruce en su camino. Ahora te revelaremos los datos curiosos que esconde este ejemplar.

¿Cuál es el 'árbol más venenoso del planeta'?

Los locales lo llaman el 'árbol de la muerte' al Manzanillo debido a que todas sus partes, desde su corteza hasta la savia y los frutos, contienen sustancias altamente venenosas. Además, se pueden hallar en diversas áreas, desde el norte de Sudamérica hasta la región de Everglades en Florida, Estados Unidos, así como también en varias regiones del Caribe.

Su nombre científico Hippomane mancinella y crece en Cartagena, Colombia, precisamente en el balneario de Playa Blanca (isla de Barú) y la urbanización los Corales. A pesar de que tiene una apariencia atractiva con hojas verdes brillantes y frutos pequeños, es uno de los árboles más peligrosos del mundo.

¿Qué partes del árbol 'Manzanillo de la muerte' son venenosas?

Cada parte del árbol contiene un poderoso veneno llamado forbol, que puede causar quemaduras graves si entra en contacto con tu piel. Incluso estar cerca de la planta en un día lluvioso resulta ser peligroso debido a que las gotas de lluvia pueden transportar el veneno. Asimismo, ingerir sus frutas puede llevar a síntomas graves, como dolor abdominal, vómitos y diarrea, y en casos extremos, podría ser mortal.

Curiosamente, este árbol también es un peligro, incluso cuando es quemado, debido a que su humo puede causar lesiones en los ojos, por lo que se debe tener mucho cuidado.

Árbol manzanillo | FOTO: Peces y plantas

¿Para qué sirve este 'árbol de Manzanillo'?

Pese a que es muy peligrosa, el árbol de Manzanillo de la muerte es de gran utilidad, tanto para la naturaleza como para los humanos. Con el tiempo, la Hippomane mancinella se convierte en un denso matorral que protege las costas contra los vientos. Además, protege las playas de América Central contra la erosión costera.

Por otro lado, los carpinteros han utilizado la madera de este árbol durante siglos para elaborar muebles. Evitan percances porque cortan con sumo cuidado y lo secan bien bajo los rayos del sol para que puedan neutralizar la savia venenosa.

¿Cuál son las características del 'Manzanillo de la muerte'?

La Hippomane mancinella, conocida comúnmente como manzanilla de la muerte, manzanillo de la muerte o manchineel, es un árbol extremadamente venenoso que pertenece a la familia de las euforbiáceas. Es nativo de regiones tropicales y subtropicales de América, incluyendo Florida, el Caribe, Centroamérica y el norte de Sudamérica.

El árbol puede alcanzar una altura de hasta 15 metros. Tiene una corteza grisácea y produce una fruta pequeña que se asemeja a una manzana, de ahí su nombre. Además, todas las partes del árbol son extremadamente tóxicas. El látex, las hojas, la corteza y la fruta contienen una savia lechosa que puede causar reacciones graves en la piel, como dermatitis severa, ampollas e inflamación. El simple contacto con la piel puede resultar en irritación. Asimismo, la inhalación del humo producido al quemar partes del árbol puede causar daños a los ojos y el sistema respiratorio.

La fruta del manzanillo de la muerte parece una manzana pequeña y verde. A pesar de su apariencia atractiva, es extremadamente venenosa y su consumo puede ser fatal, causando síntomas como vómitos, diarrea severa y daños en los riñones. En muchas áreas donde crece, se colocan señales de advertencia para alertar a las personas sobre su peligrosidad. También se suele marcar el árbol con pintura roja para indicar su toxicidad.