Roberto Guizasola: “No me arrepiento de haber venido a Rosario Central”

El lateral Roberto Guizasola está desmotivado porque el técnico de Rosario Central, Héctor Rivoira, no lo toma en cuenta en el equipo titular. Sin embargo muy profesionalmente dijo que seguirá entrenando para estar preparado, aunque es consciente de que ser suplente le quita la posibilidad de volver a la selección peruana.

Las declaraciones del “Cucurucho” fueron son recogidas a una entrevista que ofreció para Ovación Digital y reveló que solo espera cumplir con su contrato con el cuadro “Canalla” para volver a Juan Aurich, equipo donde está vinculado por un año más.

- Roberto, ¿por qué crees que el técnico Héctor Rivoira no te toma en cuenta como titular?- Realmente no lo sé, eso habría que preguntárselo al entrenador.

- Pueda que sea porque pediste que te cedan a préstamo, situación que no prosperó...- Yo creo que puede ser eso, por ahí esa situación ahora me está pasando la factura. Pero, yo sigo entrenando fuerte para que cuando me den una oportunidad no desaprovecharla.

- Acá se habló de Cristal y Alianza que pugnaban por tenerte en sus filas...- Sí, pero lo más cercano fue lo de Cristal. Realmente me hubiera gustado que se concrete, sin embargo al final no se dio.

- ¿Conversaste con la directiva de Rosario para ver la posibilidad de ser cedido a préstamo, ahora que no eres tomado en cuenta por el entrenador?- No, como te repito yo sigo entrenando muy fuerte y espero cumplir mi contrato. Cuatro meses se pasan volando...

- ¿Y de ahí vuelves al Juan Aurich?- Sí, porque tengo contrato con ellos por un año más.

- ¿Te arrepientes haber llegado a Rosario?- Para nada, uno siempre aprende cosas nuevas y acá, en Rosario, no ha sido la excepción.

- En todo caso te preocupa que no tengas ritmo de competencia y no llegues bien a la Selección?- Puede ser, pero me preocuparía mucho más si no entrenara al igual que mis compañeros, sin embargo eso no sucede....

- Pero, como jugador sabes perfectamente que una cosa es entrenar y otra jugar...- Bueno sí, pero qué se le hace. Yo estaré siempre dispuesto a jugar por mi país las veces que me convoquen. Sólo me queda tener paciencia.